Viajando con tus sueños

Porqué te regalé todos mis besos. Eran míos, sólo míos, todos eran míos. Los cuidaba, los mimaba, los paseaba. A veces les cantaba y muy poca veces, los amaba. Mis besos eran míos, dormían en mis labios y sin saber muy bien, regalaba algún beso envuelto en preguntas. Llenos de dudas me abandonaban para seguir su camino en otros labios. Mis besos los guardo para cuando el mundo los reclame entre suspiros más allá del pecado. Me olvidé de volver, el mundo me parecía pequeño y sin más comenzar mi viaje sin regreso. No puedo pensar en lo oculto, pensaré en una noche llena de estrellas, tan brillantes, que deslumbren mi mirada conquistada por el reflejo de los rayos de sol. Te cambio mi vida por un beso, mis sueños por tus recuerdos, una noche en tu cama y te daré todo lo que tengo. El vaso sigue quieto, sigue lleno y tan frío como tus sueños. Un poco más de tiempo, sólo te pido tiempo para saber lo que siento y cerraré la puerta del universo, me quedaré pensando en todo aquello que no pude...